jueves, 10 de abril de 2008

Requiem por mi Abuela /IV

Desde hace un rato estamos perdidos, mis hermanos y yo seguimos como dormidos, a ratos, la realidad nos cae como un ladrillo y lloramos como niños,
Ya pusimos una gruesa lapida en tu tumba, dice tu nombre y los nuestros,
he olvidado por completo las fechas exactas, pero estoy seguro que esto ya tiene un año.
Algunos días me he sentado en la puerta de tu casa, y espero que aparezcas comiendo helado,
tus perros también esperan impacientes y en la espera juegan un rato, pero todo el tiempo aguardan tus pasos, tus zapatitos de fieltro y la caricia de tu mano,
se paran ante cualquier sonido y huelen el aire como buscando algo.
Pintamos de amarillo tu casa, para darle un poco de vida, pero siguen dentro tus cosas,

la miro de lejos y no puedo mas pesar que es tu casa, que todas tus cosas estan ahí adentro,

los perros que tu adoptaste estan en el patio, las plantas en tu jardín, y tus arboles en la huerta,
todo te sigue esperando, a ver si regresas.