martes, 2 de junio de 2015

Panama Canal Rail Road Co.

La miré con cinismo, finalmente se había quedado dormida con la cabeza apoyada en la ventana del vagón. Vestida con su piel matinal café con leche. Sus párpados pintados de verde tendidos sobre los ojos que hasta hace un momento eran de miel. Las mejillas tersas acariciadas por por su cabello, dulcemente negro.


Ahí donde hace unos minutos había una mirada cándida, reinaba la tranquilidad y su respirar lento. Estaba a dos asientos de distancia mi lugar en el tren. Panamá siempre me regala motivos para volver.